Un pasaje al infierno: cuando viajar en micro se convierte en una odisea
Un pasajero de una empresa de micros denunció el mal estado de un vehículo en el que viajaban desde la ciudad de Daireaux a Buenos Aires. Hubo personas descompensadas por la falta de aire acondicionado.
Según relató Tomás Villanueva, "el día 13 de enero, tomó junto a sus compañeros de un grupo misionero un micro de la empresa Pullman General Belgrano en la ciudad de Daireaux con destino a Retiro, pero al subir al vehículo se encontraron con diferentes fallas que hicieron que su viaje fuera casi una pesadilla.
"El micro no contaba con aire acondicionado, tenía cucarachas en las luces de la cabina de pasajeros, no tenía numeración de asientos, faltaban cinturones de seguridad, y tenía selladas las ventanas", relató Tomás.
"La solución por parte de los choferes fue trabar la puerta del micro con una piedra, y luego con una barra de metal, para que, al avanzar por la ruta ingrese aire por ahí, un peligro para todos los pasajeros. Además, hubo pasajeros viajando en las escaleras porque no podían respirar, y no en sus asientos con cinturones de seguridad como corresponde", continúo Tomás.
Luego de pasar varias horas padeciendo el viaje con todas las fallas que tuvieron, el pasajero aseguró que "cuando llegamos a Liniers, esperamos al SAME para que atienda a las pasajeras, e hicimos la denuncia en el destacamento policial. Y una vez que llegamos a Retiro, hicimos la denuncia conjunta en la CNRT". Y agregó que "el micro llegó con más de una hora de retraso".
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