La Procuración repudia amenazas contra el fiscal Adler

Política

El Ministerio Público Fiscal denunció que el fiscal general de Mar del Plata es víctima de una campaña intimidatoria, hechos que se suman a los padecidos por Adolfo Villate y Marcelo García Berro durante el juicio a Campagnoli.

La Procuración General de la Nación envió un comunicado en el que repudia las "intimidaciones" sufridas por el fiscal general de Mar del Plata, Daniel Adler. El Ministerio Público Fiscal, organismo comandado por la doctora Alejandra Gils Carbó, aseguró que Adler fue víctima de una "campaña intimidatora" en la puerta del colegio de su hija, hechos que se suman a las amenazas contra los fiscales del jury a Campagnoli, Adolfo Villate y Marcelo García Berro.

Según el documento difundido a la prensa, el pasado jueves el fiscal Adler sufrió una "campaña intimidatoria" que incluyó "el reparto de panfletos que incluían insultos en la puerta de la escuela donde asiste su hija", como así también en las principales calles de la ciudad balnearia. Adler es fiscal general de dicha ciudad e integrante del tribunal del jury de enjuiciamiento al ahora restitudo fiscal de Saavedra José María Campagnoli.

Estos hechos, recueda el Ministerio Público Fiscal, se suman a las intimidaciones padecidas por los fiscales Adolfo Villate y Marcelo García Berro, en el marco de la misma causa. Sobre Villate, el MPF afirmó que "recibió llamados en su domicilio particular en los que lo amenazaron de muerte y el frente de su casa fue pintado con consignas intimidatorias".

"Por su parte, García Berro padeció una campaña mediática difamatoria promovida por medios y periodistas que se presentaron en el jury como testigos de la defensa. Así, el fiscal debió enfrentar la difusión de datos privados como el número y contenido de su historia clínica", agregó.

El fiscal de Saavedra y Nuñez José María Campagnoli fue restituído en su cargo hasta tanto se lleve a cabo un nuevo jury, ya que el presente proceso fue anulado por la salida de la doctora María Cristina Martínez Córdoba y el ingreso de Leonardo Miño.

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