Sindicalistas anuncian medidas de fuerza ante las trabas en las paritarias

Política

La CATT anunció un paro de transporte para el 9 de junio, pero podrìan retrasarlo para que se sumen las centrales obreras. Además, gremios oficialistas pararán esta semana y podrían sumarse ante el empantanamiento de las negociaciones en todo el país.

Primero fueron los gremios de transporte enrolados en la CATT los que le pusieron fecha a un paro nacional, pero poco a poco han ido sumándose sectores en un convulsionado panorama paritario. Las centrales opositoras ya advirtieron que saldrán a la calle y promoverán un paro nacional -de 24 a 36 horas, según cada quien- y sectores oficialistas también podrían adherir.

La fecha inicial -el 9 de junio- la puso la CATT, pero previo a eso Pablo Moyano ya había hablado de hacer un paro entre el 10 y el 12 para adherir a las centrales obreras. En el mismo sentido se expresó este martes Pablo Micheli, de la CTA opositora, que ratificó la voluntad de parar por 36 horas -lo mismo que las corrientes sindicales del Frente de Izquierda- y dijo que podrían pasar el del 9 al 10 u 11, para unificar el reclamos de todos los sectores.

Además de ellos, ya ratificaron su adhesión las CGT de Hugo Moyano y Luis Barrionuevo, mientras que los gremios de la CGT oficialista podrían repetir la fórmula del último paro, a fines de marzo: dar libertad de acción a las seccionales y bases, que definirían adheririse.

"El 9 de junio es una fecha que tiró la CATT (Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte) pero, hasta ayer, a Moyano no le terminaba de cerrar porque tenía una actividad el 8 así que, probablemente, el paro puede ser el 10 o el 11", consideró Micheli este martes.

La situación en la mayor parte de los gremios es explosiva ante los anuncios por Ganancias, que consideran irrelevantes, y los topes o techos salariales que se busca imponer desde el Gobierno Nacional.

Un ejemplo claro es la fracasada reunión del lunes entre los empresarios metalúrgicos y la UOM, en el Ministerio de Trabajo: el aumento acordado -que rondaba el 27% pero elevaba en el futuro próximo el mínimo del metalúrgico a $8.500- habría sido vetado por los funcionarios nacionales, lo que provocó que el propio Antonio Caló -líder de la CGT oficialista- deba acudir al paro de 36 horas desde este jueves al mediodía.

Antes de eso, el miércoles, pararán los trabajadores del estado porteño enrolados en ATE. La seccional Capital anunció un paro por 24 horas en reclamo por un 40% de recomposición salarial y promueven una medida nacional para el jueves 28. En total son más de 80 mil empleados públicos de todo el país los que podrían sumarse.

Otro de los gremios que iría al paro antes de junio es La Bancaria, que este martes se reunirá con la cámara empresaria con la mira puesta en más del 40% de recomposición salarial. Las expectativas son claras: ya advirtieron que la próxima semana pararían 48 horas.

La situación se extiende en casi todos los gremios. Los petroleros, liderados por el diputado del Frente Renovador Alberto Roberti, ya anunciaron que se sumarán al paro nacional de junio.

"Tenemos un planteo salarial en torno al 32 por ciento de aumento, y lo cierto es que está trabada la negociación porque hay un impedimento del Gobierno, un corsé del orden del 27 por ciento, y nosotros entendemos que eso ni mínimamente va a empatar los niveles inflacionarios", explicó Roberti en declaraciones este martes a Del Plata.

Desde el mismo espacio político, el ex ministro de Economía Roberto Lavagna aseguró que las paritarias están retrasadas "a propósito, para que los aumentos, las retroactividades, más el medio aguinaldo, todo esto llegue en el momento de las elecciones".
El Sindicato de Aceiteros lleva 14 días de paro y amenaza con desabastecer el sector
Uno de los sectores más duros y combativos es el Sindicato de Aeceiteros, que lleva 14 días de paro y amenaza con desabastecer el sector si no alcanzan un acuerdo. Entre piquetes que afectan los puertos y rutas de Santa Fe, el gremio exige un 42% de aumento y la cámara, que nuclea a los mayores agroexportadores, propone un 24% en consonancia con los pedidos del Gobierno nacional.

Más allá de las especulaciones, lo concreto es que, pasada la mitad de mayo y con miras a llegar a la mitad del año, las paritarias -que deberían revisar la erosión salarial de 2014- están, en el mejor de los casos, indefinidas. Y la tensión de las bases crece, por lo que aparecerán nuevas medidas.



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