Quisieron distraer a sus rivales y para ello trajeron ¡a Michael Phelps!
Una práctica muy común en el básquet de los Estados Unidos (incluso en la NBA) es la de intentar distraer al jugador rival encargado de los tiros libres con diferentes acciones que llamen su atención y desvien la concentración a la hora de lanzar.
Con bailes y caras jocosas, Phelps para colmo logró su cometido, ya que el tirador erró sus dos libres y Arizona terminó imponiéndose con comodidad.
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