La historia del ghanés que escapó de la guerra y sueña con jugar para Argentina
Bayan Mahmud llegó al país tras el asesinato de sus padres. Ahora juega en la cuarta de Boca y quiere cumplir su sueño.
"Estuve viviendo en Flores y me pusieron un tutor. Me dijeron si yo quería vivir en un lugar donde había africanos y me fui a Constitución, donde conseguí una pieza", detalla Mahmud sobre sus comienzos en el país.
Aunque su acercamiento al fútbol fue completamente azaroso, ya que de casualidad lo vieron jugando un "picado" en la plaza frente al hospital Garrahan y lo llevaron a jugar a Sportivo Italiano, hasta que otro veedor lo terminó metiendo en Boca.
Hoy en día, Mahmud juega en la cuarta y tiene dos sueños: llegar a la Primera de Boca y vestir la camiseta de la Selección argentina. Para eso, ya tiene la ciudadanía adquirida.
"Tengo ganas de ser el primer jugador negro en jugar para la Selección", confiesa el ghanés, que además contó que encontró a su hermano, que se había quedado en su país y que hoy también está en Argentina, mucho tiempo después y vía Facebook.
Pero esta historia, como era de esperarse, no se quedó sólo en palabras y Bayan Mahmud escribió un libro contando los detalles de su conmovedora vida, a punto tal que este sábado viajará a Paris para presentarlo.
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