Primera muerte por coronavirus en Italia: un hombre de 78 años falleció en Padua

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El paciente era uno de los dos casos detectados en esa localidad del Véneto. Hay casi 50 mil personas aisladas para evitar que se propague el virus.

Un hombre de 78 años que murió este viernes en un hospital de Padua, en el norte de Italia, se convirtió en el primer caso fata de coronavirus en ese país. Era uno de los dos pacientes que habían sido diagnosticados en esa localidad horas antes.

Adirano Trevisan, de 78 años, era padre de tres hijos y tenía varias patologías que lo habían obligado a permanecer internado en un hospital. Ahí se contagió el virus.

Además se diagnosticó a 15 personas en un centro médico de Codogno, en la región de Lombardía, al sureste de Milán. Se trata de los primeros casos de transmisión por contagio de coronavirus en Italia, informó el sitio español El País.

Los casos, y la muerte del hombre, provocaron que las autoridades sanitarias de Lombardía pusieran en cuarentena para 250 personas y aislaran a 10 poblaciones, lo que equivale a paralizar la vida de casi 47.500 habitantes.

Así fue como cerraron comercios, escuelas y edificios administrativos entre otros sitios que podrían haber congregado grandes a porciones de público.

Los casos de este viernes en el norte de Italia se suman a los tres registrados en Roma, donde permanecen internados dos turistas chinos y un italiano repatriado desde Wuhan, la ciudad china donde se originó el brote actual de coronavirus.

Las autoridades aún no lograron determinar cómo se produjeron los contagios detectados este viernes, es decir, que no pudieron establecer ni el foco de contagio ni el vínculo epidemiológico.

"Los pacientes son hombres y mujeres, todos en torno a los 40 años de edad. El único elemento que conocemos es que viven todos en la misma área", explicó el consejero regional de Salud, Giulio Gallera, sobre los casos detectados en Codogno.

Todos los pacientes en cuestión acudieron a guardias médicas entre la noche del jueves y el viernes a la mañana y tienen en común a un hombre de 38 años oriundo de Castiglione d’Adda, al sur de Milán.

Tanto la mujer del paciente, que está embarazada de ocho meses, como un amigo suyo que practicó deporte con él y tiene un bar.

A ese bar acudieron varios comensales, de los cuales tres presentaron síntomas y fueron diagnosticados con coronavirus en el centro médico de Codogno.

Luego cayeron enfermos cinco médicos y ocho pacientes que estuvieron en la misma sala de emergencias de Codogno donde atendieron al hombre de 38 años. Ese centro médico fue clausurado como medida de seguridad.

Pero además fue necesario aislar a todos los compañeros laborales del hombre, que trabaja en Unilever Italia, y al los de su amigo, que es gerente de la marca de fibras sintéticas MAE.

Incluso se aisló a los médicos y enfermeras que trataron al paciente de 38 años cuando llegó a Codogno.

"Es necesario aislar inmediatamente las zonas donde se desarrolló el virus para contenerlo", explicó el responsable de Protección Civil de Lombardía, Pietro Foroni, que llamó a no sembrar el pánico, sino a "hacer entender a la gente que las medidas que se han tomado son esenciales para el bien de la comunidad".

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