Pese a la grave situación sanitaria en Perú, Machu Picchu reabrirá el 1° de julio

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Las autoridades de la ciudadela, la población y la sociedad civil firmaron un acuerdo en el que se comprometen a seguir las directivas del Gobierno de Perú.

A pesar de la grave situación sanitaria que transita Perú por el coronavirus, decidieron que el parque arqueológico Machu Picchu, ubicado en la región de Cusco, reabrirá sus puertas a partir del 1° de julio bajo estrictos protocolos de seguridad para evitar nuevos contagios.

Así lo han establecido las autoridades de la ciudadela, la población y la sociedad civil, que han firmado un acuerdo en el que se comprometen a seguir las directrices dictadas por las autoridades sanitarias peruanas durante la reactivación del turismo en el contexto de la pandemia, según informó Europa Press.

También están coordinando con las empresas de transporte y los servicios ferroviarios para que generen reglamentaciones sanitarias, y sólo podrán llevar el 50% de su capacidad de traslado de pasajeros con el fin de evitar aglomeraciones.

El alcalde de Machu Picchu, Edwin Baca, manifestó que mediante la firma de “Juntos por Machu Picchu", los comerciantes, trabajadores de los hoteles y restaurantes deben someterse a pruebas de descarte de manera periódica, según publicó el portal RPP Noticias.

Esta medida tiene que ver con que el 85 % de la recaudación del distrito de Machu Pichu depende del turismo.

Las muertes por coronavirus en Perú superaron las 5.500 y los contagios subieron a 199.696, ubicando al país sudamericano en el octavo lugar entre los más golpeados por la pandemia, mientras expertos advirtieron sobre la precaria situación de las comunidades indígenas en el marco de la emergencia sanitaria.

El Ministerio de Salud peruano precisó que en las últimas 24 horas fallecieron 106 personas, elevando la cifra a 5.571, mientras que se reportaron 3.181 nuevos casos, alcanzando a 199.696 la cantidad de contagios en todo Perú, el segundo país de Latinoamérica más afectado por la pandemia detrás de Brasil.

El gobierno nacional dispuso la extensión del estado de emergencia en todo el territorio hasta el 30 de junio, una medida que rige desde mediados de marzo, que implica el aislamiento y la inmovilización obligatoria, con toque de queda entre las 21 y las 4.