San Lorenzo ve a Arsenal y sufre
Por DyN
Como sucediera hace tres días, cuando se enfrentaron por la Copa Sudamericana en el Nuevo Gasómetro, Arsenal se aprovechó hoy de las fallas y las dudas de San Lorenzo de Almagro para derrotarlo nuevamente, en esta ocasión 4-2, y abrir un gran interrogante sobre el futuro del equipo dirigido por Ramón Díaz en el torneo Apertura.
Sin embargo a los 13 minutos llegó la primera alegría y fue para el local. El paraguayo Aureliano Torres despachó un fuerte zurdazo de media distancia que se coló al lado del palo izquierdo ante una reacción ineficaz de Mario Cuenca.
Arsenal, mientras tanto, no intentó una búsqueda alocada de la igualdad, sino que por su incapacidad para crear juego sólo logró aproximarse al arco de Agustín Orión a través de tiros de media distancia.
Pero a cinco del final, en una jugada aislada, Alejandro Gómez habilitó a José Luis Calderón, quien se dejó caer ante la llegada de Sebastián Méndez. Juan Pablo Pompei compró, expulso al defensor de San Lorenzo por último recurso y el mismo delantero de penal puso el empate.
Sin embargo había espacio para más. Un minuto después del empate, Osmar Ferreyra le puso la pelota en la cabeza a Andrés Silvera y el delantero mandó el balón adentro del arco.
Con un hombre menos y la ventaja a su favor, San Lorenzo salió al segundo tiempo con la decisión de retrazarse en el campo y apostar todo en ataque a la velocidad de Diego Rivero y el olfato goleador de Silvera.
Arsenal, como en gran parte del primer tiempo, utilizó como única vía de llegada los pelotazos aéreos, y aún con las todas las condiciones a su favor estuvo a punto de despedirse del partido, pero una acertada intervención de Cuenca ante un remate de Ferreyra lo evitó.
Esta atajada fue, para la gente de San Lorenzo, el preanuncio de la noche que se vendría en un lapso de 12 minutos, los que mediaron de los 28 a los 40, cuando Martín Andrizzi (en posición adelantada), Diego Villar y nuevamente Calderón pusieran el marcador 4-2 en favor de los dirigidos por Gustavo Alfaro.
San Lorenzo tomó este partido como una revancha por lo sucedido el jueves último, pero no lo jugó como para concretarla. Arsenal, en cambio, estuvo más tranquilo y cuando se presentó la oportunidad, fue muy práctico, la aprovechó.
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