Amor más allá de la vida: aprendió buceo para hallar el cuerpo de su mujer que murió por el tsunami

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A 10 años del tsunami hay al menos 2.500 personas desaparecidas. Por eso un hombre de 57 años decidió aprender a bucear para intentar encontrar a su amada esposa.

Un hombre de 57 años se encuentra en plena cruzada para hallar los restos de su esposa, quien desapareció durante un tsunami que afectó el noreste de Japón hace casi 10 años.

“Va a tomar tiempo encontrar a todos. Tengo muchas ganas de encontrar a mi esposa, pero sé que hay una gran posibilidad de que no lo haga. Por en el momento en que estoy entrenando porque necesito mejorar muy rápido”, señaló Yasuo Takamatsu de acuerdo con el portal mexicano 24 horas.

Takamatsu, conductor de autobús de profesión, nunca fue un candidato natural para aprender a bucear y le preocupaba no poder hacerlo, pero dice que se siente empujado al agua cuando piensa en la última vez que escuchó de su esposa Yuko, antes de que la ola de casi 20 metros la envolviera. Ya obtuvo su título de buceo, pero el buceo para cuerpos es una actividad peligrosa y requiere experiencia, aunque sus instructores tienen fe en su habilidad.

“Ella era una persona gentil y amable. Ella siempre estaría a mi lado, física y mentalmente. La extraño, extraño la gran parte de mí que era ella”, contó el hombre, y añadió: “Me siento fatal al pensar que ella todavía está ahí fuera. Quiero llevarla a casa lo antes posible”.

El último contacto de Takamatsu con su esposa fue un mensaje de texto que ella le envió a las 15.21, media hora después de que un gran terremoto submarino sacudiera Japón el viernes 11 de marzo de 2011 y desatara un tsunami imponente que viajó a la velocidad de un avión a reacción hacia la costa japonesa. Semanas más tarde, mientras recorrían el área, los trabajadores del banco encontraron el teléfono móvil de Yuko y se lo devolvieron a Takamatsu.

El hombre secó y encendió el teléfono para ver que ella había escrito un mensaje de texto que él nunca había recibido, casi exactamente en el momento en que se creía que el agua había llegado al techo del banco. “Tsunami enorme’. Eso fue todo lo que escribió en el último”, señaló.

Más de 18 mil personas murieron a causa de ese tsunami. Más de dos mil quinientos cadáveres aún están desaparecidos. El fenómeno también destruyó comunidades y arrastró casas y automóviles.

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