La Libertadores, eterna cuenta pendiente de Julio César

Deportes

El torneo continental parece ser la piedra en el zapato del actual entrenador de Boca, que como jugador ya había perdido tres finales y que ante Corinthians volvió a quedar en la puerta de la consagración.

Podría decirse que Julio César Falcioni se maneja en los encuentros de Copa Libertadores como pez en el agua. Sin ir más lejos, el ex arquero es el jugador argentino con más presencias en el torneo continental, con 77 participaciones.

Sin embargo, existe una especie de maleficio que le impide al actual entrenador de Boca Juniors llegar a lo más alto: como jugador del América de Cali disputó tres partidos finales y los perdió todos.

Jugando para el equipo colombiano, el argentino llegó a la definición en tres años consecutivos (1985, 1986 y 1987), y en dos de esas tres definiciones cayó en manos de equipos de nuestro país.

En la primera, el verdugo fue el Argentinos Juniors de Claudio Borghi, que lo derrotó en un tercer partido que tuvo que jugarse por haber empatado en el mano a mano ida y vuelta. Al año siguiente, el que le iba a negar la chance fue River, que terminó consagrándose en el Monumental de la mano de Héctor "Bambino" Veira.

Finalmente, en 1987, Falcioni arribó con la esperanza a cuestas para romper la maldición a la final ante Peñarol, que nuevamente le iba a negar la chance de festejar en un desempate en el que lo derrotó por 1 a 0 en Santiago de Chile.

Uno de los compañeros y más fieles laderos de Falcioni en ese recordado equipo colombiano que ganó cinco torneos locales pero que no pudo conquistar América, fue nada menos que Ricardo Gareca, actual entrenador de Vélez Sarsfield.

Esta noche, la derrota lo volvió a golpear duramente, esta vez como entrenador. Su equipo cayó contundentemente ante Corinthians por 2 a 0 en la vuelta de una nueva final y lo dejó, otra vez, con las ganas de levantar un trofeo que ya se transformó en su verdadero karma.

Dejá tu comentario