Argentina fue contundente y derrotó a Suecia en Estocolmo

Los cuatro hombres de ataque (Lionel Messi, Di María, Higuaín y Agüero) tuvieron un gran primer tiempo y por eso cada aproximación argentina parecía tener destino de red, sumado a los desacoples defensivos del conjunto local,

Además, tanto Javier Mascherano como Fernando Gago hacían a la perfección su labor de cortar en el mediocampo y también se sumaban al ataque en algunas ocasiones. Por esto, Argentina tuvo el control del balón durante casi toda esa etapa.

Sin embargo, otra vez la defensa argentina mostró algunos lunares, y precisamente uno de ellos fue el que permitió la igualdad de los suecos a los 17 minutos, cuando Olsson aprovechó una distracción de Federico Fernández a la salida de un tiro de esquina, le ganó en el salto y venció a Sergio Romero.

Pero Argentina no renunció a su idea de juego y por eso no le costó volver a ponerse en ventaja, primero con una exquisita definición del Kun Agüero sobre la salida del arquero Andreas Isaksson, y luego con un rebote aprovechado por Higuaín tras un disparo de afuera del área de Messi.

El 3 a 1 hizo que los de Sabella dejen de atacar tanto, aunque esto tampoco hizo que los suecos reaccionaran. Un Zlatan Ibrahimovic muy disminuido y alguna que otra "corajeada" fueron los únicos argumentos con los que el local amagó con reaccionar, pero apenas se quedó en eso.

Para el segundo tiempo, Ibrahimovic fue reemplazado (se sabía que sólo iba a jugar 45 minutos) y Suecia se quedó sin su "as de espadas", por lo que las esperanzas de una levantada se hicieron casi remotas.

Argentina dispuso de algunas oportunidades como para celebrar un cuarto gol lujoso, en especial en el minuto 10, cuando Messi tocó magistralmente por encima de la salida de Andreas Isaksson, pero el arquero se recompuso y rechazó de chilena.

En esa escena quedó la sensación de que el recurso del guardavalla llegó cuando la pelota había sobrepasado entera la línea, pero el árbitro francés Antony Gautier no convalidó la conquista.

Otra maniobra que pudo haber concluido en un cuarto tanto para los de Sabella ocurrió sobre el cuarto de hora, cuando Gago puso otro pase exquisito a Agüero y el ex Independiente eliminó hasta la salida del guardameta, pero desde un ángulo relativamente cerrado el disparo final pegó en la parte externa de la red, aunque muy cerca del poste izquierdo.

Como contracara, hubo un cruce oportunísimo de Cristian Ansaldi para abortar un ataque sueco.
Ya en el desenlace los locales achicaron la diferencia en el tanteador con un gran tiro libre que achicó la brecha y sólo sirvió para la estadística.

En el juego la superioridad argentina fue por demás evidente y, salvo los desacoples defensivos que una vez más volvieron a aparecer, Sabella debe haber quedado muy conforme en la fría noche de Estocolmo.