Blockchain para principiantes: qué es y cómo funciona

Economía

Su uso ya no solo se vincula únicamente a Bitcoin y otras criptomonedas, sino que también está relacionada a otras aplicaciones.

En el año 2009 nacía Bitcoin, la primera moneda digital descentralizada de la historia. Junto a ella, surgió una tecnología que poco a poco comenzó a despertar tanto interés como los activos digitales, a punto tal de que hoy cada vez más gobiernos, empresas e instituciones crean proyectos para sumarla a sus procesos de trabajo.

La tecnología blockchain hace tiempo ya que ha roto las fronteras a partir de la cual fue creada. Su uso ya no solo se vincula únicamente a Bitcoin y otras criptomonedas, sino que también está relacionada a contratos inteligentes, NFTs (Non Fungible Tokens), modelos de identidad digital descentralizada, entre otras aplicaciones. Si bien es una tecnología joven, que se encuentra dando sus primeros pasos, ya ha logrado generar una industria robusta con un potencial que los especialistas remarcan como excepcional.

De acuerdo a un informe dado a conocer esta semana por la red social Linkedin, en los últimos doce meses creció un setenta y seis por ciento el número de personas que trabajan en proyectos o empresas vinculados a esta tecnología. Según datos del Foro Económico Mundial, para el 2027 un diez por ciento del Producto Bruto Interno (PBI) mundial se encontrará almacenado en blockchain. Las cifras hablan por sí solas.

Pero, ¿qué es blockchain? ¿por qué es tan valiosa esta tecnología? ¿cuál es su funcionamiento? ¿qué intereses despierta dentro de los Estados y las empresas que buscan incorporarla? ¿qué usos posibles tiene por fuera de las criptomonedas?

Si bien muchas preguntas que surgen sobre blockchain aún no fueron del todo respondidas, como todos sus posibles usos y aplicaciones, en este artículo te vamos a contar de forma sencilla cómo funciona esta tecnología que está revolucionando el mundo entero.

Qué es la tecnología blockchain y cómo funciona

La tecnología blockchain, o cadena de bloques, es una base de datos que funciona como un libro contable que permite almacenar, registrar y verificar todas las transacciones que se realizan dentro de la cadena.

Si bien existen redes con diferente grado de centralización, una de las características más importantes de esta tecnología es su descentralización; es decir, que los distintos bloques que componen la blockchain no se encuentran únicamente almacenados por una entidad central sino que se encuentran distribuidos en distintos nodos o computadoras de la red.

En blockchain como la de Bitcoin y Ethereum, por ejemplo, su fortaleza y seguridad reside en la descentralización. Cuando una transacción es realizada dentro de la red, varios nodos deben verificarla, pudiendo ser validada a partir del consenso. De esta forma, un solo nodo no puede generar modificaciones unidireccionales de la red, garantizando su inmutabilidad.

Una de las herramientas que más se usa dentro de la blockchain es la criptografía. La información que se registra dentro de la cadena de bloques queda encriptada, asegurando su privacidad y seguridad.

A medida que se van generando nuevos bloques de información que nacen a partir de las transacciones que se agrupan y registran dentro de la blockchain, estos bloques se van sumando como eslabones dentro de la cadena general. Esto permite que todos los nodos de la red puedan verificar todos los bloques que la componen, asegurando su transparencia.

Cada bloque de la cadena tiene un número de identificación, conocido como “hash”, que es único e irrepetible. Cuando un nuevo bloque se genera y verifica, este ya no puede ser modificado. Asimismo, cada nuevo bloque de información contiene el “hash” del bloque que lo precede en la cadena, de modo que no pueda agregarse otro, alterando el orden de la blockchain. De esta forma, todas las transacciones realizan dentro de la blockchain son posibles de ser rastreadas.

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Qué tipos de blockchain existen

Si bien, como dijimos, la potencialidad de este tipo de redes se sustenta en su carácter público, abierto y descentralizado, existen diferentes tipos de blockchain, que se pueden dividir en: públicas, privadas y federadas.

Las blockchain públicas son, como la de Bitcoin y Ethereum, las que mejor representan los aspectos novedosos de la tecnología. Son protocolos abiertos y transparentes, que permiten que cualquier persona, con un equipo informático adecuado, pueda conectarse y verificar las transacciones de la red. Al ser absolutamente descentralizadas, no hay una autoridad central que pueda limitar la participación, restringir el acceso o modificar patrones de su funcionamiento.

Las blockchain privadas, en cambio, son propiedad de una entidad específica, sea esta una empresa privada, una organización o institución, o incluso una persona o grupo de personas. Para participar de este tipo de cadenas de bloque, también conocidas como permisionadas, es necesario contar con la autorización de la entidad dueña de la red. En estos casos, la autoridad de la blockchain regula las transacciones de la cadena, compartiendo el registro con el resto de los participantes de la red.

Por último, existen las blockchain federadas. Estas redes combinan aspectos de las públicas y las privadas, siendo, en su mayoría, parcialmente descentralizadas. Si bien en estas blockchain el acceso es privado, es decir que requiere de la entidad que la controla, los registros y la información verificada dentro de la cadena es pública. Este tipo de red es útil para, por ejemplo, gobiernos o entidades públicas, que utilizan esta tecnología dentro de la administración pública, siendo la autoridad de la red, pero abren sus registros a la ciudadanía.

En los casos de las blockchain privadas y federadas, a pesar de que el aspecto de descentralización queda fuertemente opacado, la fuerza de la tecnología, y por ende el interés que muchas veces presentan Estados y empresas en incorporarla, reside en la seguridad que garantiza. Al utilizar esta tecnología, las entidades pueden almacenar y compartir información de forma segura, un hecho no menor en tiempos de vulneración de datos.

Quién fue el creador de blockchain

A ciencia cierta, nadie sabe. El bloque génesis de la primera blockchain de la historia, la de Bitcoin, creado el 3 de enero de 2009, fue hecho por Satoshi Nakamoto, un seudónimo de una persona o grupo de personas que aún se desconoce su identidad.

Dado que el protocolo de Bitcoin es de código abierto, fue posible replicar esta tecnología a lo largo del tiempo, multiplicando la cantidad de blockchain que existen en la actualidad.

Qué es una blockchain en criptomonedas

A pesar de que, como mencionamos al principio, hoy en día existen distintos usos y aplicaciones de esta tecnología, donde más sentido ha hecho blockchain por el momento es en el ámbito de las criptomonedas.

Las características y funcionamiento de esta tecnología, que la vuelve descentralizada, pública, segura, inmutable, resistente a la censura, transparente y trazable, ha brindado confianza en el uso, emisión y almacenamiento de las criptomonedas, entre las que se destacan, por su valor, grado de adopción y crecimiento, Bitcoin y Ethereum.

En el caso de las criptomonedas, la tecnología blockchain es el soporte sobre el cual estas se generan y funcionan. Cada protocolo o red cuenta con sus propios activos digitales, su propio tipo de funcionamiento y su propio mecanismo de generación de valor. En general, todas las criptomonedas cuentan con un documento fundacional, conocido como White Paper, que detalla las características de la red y sus activos.

La tecnología blockchain solo cuenta con trece años de vida. En este breve lapso, muchas cosas ya se han transformado, en especial los sistemas económicos y financieros. ¿Qué más va a revolucionar en el futuro?

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