Matan a ladrón que robó a Piazza: 'Quiero pena de muerte para estas lacras'
* "Cuando tenés un revólver en la cabeza con un drogado que te está maldiciendo, tenés ganas de que se lo lleve el diablo", dijo el diseñador.
*Escuchá el audio de Piazza en la nota.
El diseñador de modas Roberto Piazza afirmó hoy que los delincuentes que entraron a robar a una pizzería del barrio de Belgrano donde se encontraba cenando "estaban muy drogados y agresivísimos", y enfatizó que le "hubiera gustado que los maten a los tres, no a uno solo", como ocurrió al enfrentarse con la policía.
Uno de los ladrones, al intentar escapar y tirotearse con efectivos de la Policía, finalmente murió, y según relató Piazza, fue el mismo que lo tenía apuntado a él con un arma de fuego mientras lo insultaba y le exigía que le entregara el dinero.
El reconocido modisto admitió que en un momento, mientras estaba dentro de la pizzería con los delincuentes amenazándolos, pensó que le iban a dar "un balazo en la cabeza" por la forma en que lo trataban.
También sostuvo: "Cuando tenés un revólver en la cabeza con un drogado que te está maldiciendo, tenés ganas de que se lo lleve el diablo".
"Me hubiera gustado que los maten a los tres, no a uno solo. Este tipo de gente me tiene harto, son resentidos que tienen mucho odio", añadió en declaraciones radiales formuladas horas después del hecho.
"Fue muy feo todo lo que sucedió. Uno de ellos, que después fue el que murió, me había apoyado una pistola en la cabeza. Si yo decía algo, me daba un balazo en la cabeza. En el estado en que estaba, tan drogado, me quería matar", dijo más tarde el diseñador al hablar con la prensa, en la puerta de la seccional a la que fue a buscar las pertenencias que le habían robado.
Además, admitió que quiere "la pena de muerte para estas lacras".
Los delincuentes que protagonizaron el robo en la pizzería y restaurante "La Farola", del barrio de Belgrano, escaparon con dinero de la caja del local y pertenencias de los comensales -entre los cuales se encontraba Piazza-, pero fueron perseguidos por la Policía y finalmente en la localidad de Villa Bosch uno de ellos murió baleado y los otros dos fueron detenidos.
Piazza contó que pudo recuperar casi todas las pertenencias que le habían robado, excepto el teléfono celular, donde, según contó, tenía "toda la agenda y cosas de laburo".
"Lo demás, me lo dieron todo en la comisaría. Pero estaba todo ensangrentado, porque el que me robó a mí es el que murió en el tiroteo. Era todo un asco", dijo en declaraciones a un canal de cable.
Al relatar lo sucedido en el momento del inicio del asalto, el reconocido diseñador de modas contó: "Los que entraron eran tres personas jóvenes, una como de 25 años y las otras de unos 30. Estaban los tres muy drogados".
"Uno se paró adelante de la puerta (del local) y empezaron a pedir que les diéramos todo. Empezaron a golpear y a romper botellas y vasos, mientras le pedían a la gente que le diera plata y joyas", señaló Piazza, e insistió: "Los tipos estaban muy drogados".
En su caso particular, dijo que cuando uno de los delincuentes lo reconoció, comenzó a gritarle, a insultarlo y a maltratarlo, mientras le exigía que le entregara todas sus pertenencias.
"Cuando descubrió quién era yo, se puso muy agresivo. Me decía: `vos sos famoso, dame toda la guita, hijo de p...`. Me apuntó con la pistola en la cabeza. Una amiga que estaba conmigo se descompuso. Después (el delincuente) voló todo lo que estaba en la mesa. Rompió todo", relató.
Dejá tu comentario