Firulais, el perro que no se mueve de la tumba de sus dueños
El tierno can acompañaba a su dueño a llevarle flores a su esposa al cementerio de Cañuelas hasta que el hombre también murió. Desde hace más de diez días, el animal duerme junto a los nichos de sus dueños.
Firulais junto a la tumba de sus dueños
El día que su dueño murió, el perro fue quien encabezó el cortejo fúnebre. Lo curioso fue que, cuando todos los familiares se fueron, notaron que el perro quería quedarse en el lugar, donde las dos personas que lo cuidaron toda su vida fueron enterradas juntas.
Allí permanece desde hace días, donde vive gracias al alimento y al agua que le dan los empleados del lugar.
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