¿Quién es Bernie Sanders, el ex carpintero que le disputa la candidatura demócrata a Hillary Clinton?

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Los cinco aspirantes a la candidatura presidencial demócrata participaron del primer debate de cara a las elecciones de 2016. El senador por Vermont y la ex secretaria de Estado fueron los grandes protagonistas.

El senador por Vermont, Bernie Sanders, es el principal rival de Hillary Clinton en la carrera por llegar a la presidencia de Estados Unidos. Ambos acapararon la atención anoche en el primer debate entre los cinco postulantes a la candidatura presidencial por el Partido Demócrata.

Además del senador y la ex secretaria de Estado, participaron de la velada el ex senador por Virginia, Jim Webb; el ex gobernador de Maryland, Martin O'Malley; y el ex gobernador de Rhode Island, Lincoln Chafee.

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Sin embargo, Sanders y Clinton fueron quienes se destacaron a la hora de debatir el conflicto en Siria, la desigualdad y la inmigración, y la portación de armas. Pero, ¿quién es este político de 74 años que le disputa la candidatura a Hillary?

Antes de incursionar en el mundo político, Bernie Sanders fue carpintero y documentalista en el estado de Vermont, adonde se mudó desde su natal Nueva York.

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Hijo de un inmigrante polaco, creció en el seno de una familia judía en el barrio de Brooklyn. En 1981, fue elegido alcalde de la ciudad de Burlington, en Vermont. Diez años después fue elegido para representar a Vermont en la Cámara de Representantes y, desde 2006, es senador nacional.

Al comenzar su campaña para ser candidato presidencial por el Partido Demócrata, rechazó las donaciones de las grandes corporaciones y desde hace semanas no para de crecer en las encuestas, que lo muestran cada vez más cerca de la ex primera dama.

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Su énfasis en temas considerados tabú en la sociedad estadounidense despertó la pasión entre los jóvenes, los ancianos y las minorías progresistas del Partido Demócrata. De tal modo, que anoche durante el debate fue tendencia en Twitter.

Ante sus competidores, denunció la desigualdad económica como el gran mal de Estados Unidos y alertó de la "crisis sin precedentes" que enfrenta el país. "Nuestro sistema de financiamiento electoral es corrupto y está socavando la democracia estadounidense", dijo.

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