Explosión en Rosario: otro gasista confesó que manipuló la válvula

Sociedad

El hombre declaró ante la justicia rosarina y admitió que trabajó en el edificio de la calle Salta doce días antes de que ocurriera la tragedia que dejó 22 muertos.

Un gasista matriculado declaró ante la Justicia de Rosario que trabajó en el edificio de Salta 2141 doce días antes de que se produjera la trágica explosión, en la que murieron 22 personas.

Ante la fiscal de la causa, Graciela Arg[uelles, el hombre reconoció que manipuló la válvula del gabinete sin saber que sólo podía hacerlo la empresa licenciataria Litoral Gas.

La funcionaria judicial contó que "este gasista fue convocado a prestar declaración indagatoria, como todas las personas imputadas en la causa, y respondió a las preguntas de la fiscalía y de su abogado defensor".

Y agregó: "Se remitió al trabajo que realizó en el gabinete. Dijo que fue convocado a través de la administración a partir del llamado del plomero, por el reclamo de una vecina por poca presión de gas, y su trabajo fue cambiar dos cañitos y arreglar un codo".

"Lo que nos sorprendió es que dijo que había cerrado la válvula de servicio. Ante la pregunta de la fiscalía sobre si había operado la válvula, dijo que sí", precisó la doctora Argüelles en declaraciones a radio Dos.

Por último, la representante del ministerio público anunció que el próximo martes habrá una audiencia para los familiares de las víctimas, en la que se les explicará los detalles.

La causa, caratulada como estrago culposo agravado por la muerte de 22 personas, tiene como principal imputado al gasista Carlos García, quien la mañana de la tragedia pretendía cambiar un regulador cuando se produjo la trágica fuga, y que aguarda las actuaciones en libertad.

Además, la Justicia imputó a los administradores del edifico por no cuidar espacios en común de la propiedad ni cumplir las normativas para la contratación de un gasista.

Para determinar qué sucedió la Justicia dispuso peritar distintas piezas que integraban el gabinete de gas, y luego de que fueran revisadas por la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), los elementos se enviaron a Mar del Plata para que los verifique GIE S.A., una compañía privada que presta servicios de ingeniería. La investigación para determinar las causas de la explosión tuvo contratiempos en la Justicia, lo que generó quejas entre los familiares de las víctimas.

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