La inesperada confesión sexual de Daniela Celis que explica su ruptura con Thiago Medina: "Un turro"
La ex Gran Hermano se sinceró con el streamer Martín Cirio y contó el verdadero motivo por el cual decidió separarse. Mirá.
El apasionado romance entre Daniela Celis -más conocida como "Pestañela" tras su paso por Gran Hermano 2022- y Thiago Medina dio como fruto a dos mellizas llamadas Laia y Aimé. Lo cierto es que, lo que empezó entre los pasillos de la casa más famosa del país, finalizó hace algunos meses luego de que la pareja no lograra entenderse en algunas cuestiones.
Sin embargo, en las últimas horas Daniela decidió contar el verdadero motivo que provocó la ruptura con su excompañero de convivencia. En diálogo con Martín Cirio vía streaming, la ex GH se remontó a los comienzos del vínculo y lo que ella considera que fue determinante para la separación.
Sin dejar mucho lugar a la imaginación, Celis contó: "Yo creo que un poco nos separamos por ese motivo... como no cogíamos tanto. Él fue sincero conmigo y me dijo 'yo quiero tener relaciones sexuales, no quiero cagarte, pero si no estamos juntos prefiero separarme y estar con otras personas'", reveló.
En este sentido, indicó: "Habla bien de él y su palabra porque yo una vez le dije que no quería infidelidad. Era un trato previo porque yo le dije que no quería que nadie me mande fotos suyas con otra mina. Se ve que se lo grabé tanto que así fue", continuó.
Seguidamente, "Pestañela" redobló la apuesta y advirtió: "Él quería coger todos los días, yo antes también era así y por eso matcheamos. Nunca en mi vida cogí tanto, siete u ocho veces al día, por todos lados, en todas partes de la casa, los dos transpirados, no podíamos respirar, vivíamos cogiendo, tomábamos agua y cogíamos. Así era nuestra vida".
"¿Qué pasó? Después de eso, obviamente me quedé embarazada. Entonces el chabón me dice 'me mostraste algo que no era', y no, no es que no era, es que tenemos dos nenas adelante nuestro, ¿cómo querés que me ponga en cuatro? No puedo", señaló la joven de 29 años.
"Entonces, después dijimos 'un día sí, un día, no', después cada dos días, después una vez por semana, después ya era una vez al mes y no le gustó un carajo", cerró su explicación.
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