"Degenerado": la descalificación de un cardenal al arte moderno con el mismo lenguaje que los nazis

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El arzobispo de Colonia, el cardenal Joachim Meisner, desencadenó muchísimas críticas en Alemania al calificar el arte sin significación religiosa de "degenerado", un término que utilizaron los nazis para perseguir movimientos como el expresionismo o el cubismo.

Según informó una portavoz del arzobispado colonés, Meisner, mantiene sus declaraciones, formuladas el pasado viernes durante una homilía en la catedral de Colonia con motivo de la inauguración de un nuevo museo, "pese a la lluvia de críticas" que arrecian de grups de judíos, políticos e intelectuales alemanes.

"Cuando la cultura se desconecta del culto, de la adoración de Dios, decae en un simple ritualismo y degenera, perdiendo su orientación", fueron las palabras del cardenal, de 73 años, conocido por sus convicciones ultraconservadoras.

El religioso utilizó el término "entartet" (degenerado), considerado un tabú desde que lo acuñaron los nazis para denigrar el arte expresionista, abstracto, dadaísta o cubista, y a sus respectivos autores.

Max Beckmann, Marc Chagall y Ernst Ludwig Kirchner fueron algunos de los artistas considerados "entartet", lo que equivalía a ser un proscrito, a quien más le valía optar por el exilio ya que le estaba prohibido exhibir sus obras en Alemania y trabajar, y, cuando lo hacía, sus obras le eran requisadas.

Meisner no pidió disculpas, como exigen el Consejo Central de los Judíos en Alemania, que lo calificó como un "intelectual incendiario" y el presidente de la Academia de las Artes, Klaus Staeck, también exigió una disculpa ante las palabras "inequívocas" del cardenal.

Hace tres años Meisner equiparó el aborto con el holocausto, aunque en aquella ocasión, y ante las críticas, sí se retractó.

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