Quién era Daiana Mendieta, la joven que fue hallada sin vida este martes en un aljibe en Entre Ríos
Su familia la buscó durante varios días hasta que se confirmó la peor noticia: habría sido víctima de un femicidio. El único sospechoso es un vecino de 55 años.
La Policía de Entre Ríos encontró este martes el cuerpo de Daiana Magalí Mendieta, que había desaparecido el viernes pasado en la localidad de Gobernador Mansilla, departamento Tala. Los restos de la joven fueron hallados en el fondo de un aljibe, por lo que se sospecha que fue víctima de un femicidio.
Daiana, de 22 años, vivía en Gobernador Mansilla, una localidad que en el censo de 2010 tenía casi 2300 habitantes y está comprendida por un área urbana y una rural. Es de suponer que sus vecinos la conocían, al menos de vista, y esa puede ser una pista para esclarecer su posible femicidio.
La joven se había recibido de bachiller en el Instituto Parroquial Mansilla, y en 2024 había obtenido el título de perito clasificadora de granos, lo que podía darle una salida laboral a nivel local.
Algunas personas la conocían por su actividad en Intagram, donde tenía apenas 23 posteos que le valieron 3.000 seguidores, más gente de la que vive en Gobernador Mansilla. En una cuenta privada en la misma red social Daiana le daba espacio a su escritura y a su interés por la astrología.
Investigan el crimen de Daiana Mendieta
Hasta el momento la Policía de Entre Ríos detuvo sólo a un hombre de 55 años, apodado "Pino", que reside cerca de la casa de Daiana y que amenazó con un arma de fuego a los oficiales que fueron a allanar su propiedad el domingo pasado, antes de que apareciera el cuerpo de la joven.
La familia de Daiana había reportado su desaparición el sábado 4 de octubre, tras perder contacto con ella.
A partir de ese momento se supo que la joven salió de su casa pasadas las 20 del viernes 3, y que conducía su auto, un Chevrolet Corsa Classic que apareció el domingo a la madrugada abandonado al costado de un camino vecinal, a 2 kilómetros de Gobernador Mansilla.
Daiana era descrita en el pedido de información sobre su paradero como una joven de 1,72 de altura con el cabello oscuro, largo hasta la altura de los hombros, y ojos marrones oscuros.
Al momento de salir de su casa vestía una calza gris, una remera color blanca y zapatillas Vans tipo botitas, de color negro. Tanto su ropa como el estado de su cuerpo son ahora material de investigación en la causa judicial.
El caso está en manos de la jueza de Garantías Silvina Graciela Cabrera y la fiscal de Entre Ríos Emilce Reynoso.
Temas
Las Más Leídas
Dejá tu comentario