El pacto "a muerte" entre Rafael Di Zeo y Mauro Martín

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Los barrabravas habrían arreglado encontrarse en Santa Fe para dirimir el control de la hinchada de Boca, según se desprende de escuchas telefónicas.

Rafael y Fernando Di Zeo, ex líderes de la barrabrava de Boca, y Mauro Martín, el actual cabecilla del grupo,en este momento internado con pronóstico "delicado pero estable" tras un balazo en el estómago, habrían pactado una batalla "a muerte".

La intervención de los teléfonos celulares de los hermanos Di Zeo y Martín habría dado la clave para explicar la guerra que ocurrió a la vera de ruta en Santa Fe, donde Boca disputó ante Unión la cuarta fecha del torneo Inicial.

Tras la investigación, se confirmó que los disparos que hirieron a Martín y a otros cuatro barras partieron de un Peugeot 206 negro. Tres ocupantes de ese auto se encuentran detenidos, luego de la comprobación positiva del control de dermotest (la prueba que determina si una persona disparó un arma de fuego).

Esta lunes, el ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, admitió telefónicamente desde Radio Dos de Rosario, la posibilidad de un pacto de muerte entre las dos barras xeneizes. Incluso, lamentó que "se quiera dirimir en el interior una cuestión que es netamente de ellos, en Buenos Aires".

"No fue una tragedia porque la policía, que venía monitoreando la situación, compiló información que coincidían en un eventual enfrentamiento", informó el funcionario.

La gente que responde a (Rafael) Di Zeo llegó a Santa Fe en horas de la madrugada y sin custodia policial.

Como no se permitió el ingreso de simpatizantes que no tuvieran la entrada, se los detuvo cerca de la capital rosarina. Los barras dijeron que las entradas las entregarían más tarde algunos dirigentes, sin embargo, tuvieron que volverse.

Luego se detuvieron a la altura de Arocena, tratando de hacer tiempo. Allí habrían decidido esperar al grupo que encabeza Martín, y que venía hacia la autopista por la A012 (pasando por Roldán). Fueron hasta San Lorenzo y allí esperaron. Cuando la gente de Martín llegó, se bajaron desde los micros y se produjo el enfrentamiento. "Desde uno de los coches (de los 11 que regresaban a Buenos Aires) partieron los disparos", relató Lamberto.

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