El hombre asesinado en Castelar ya había sufrido el robo de una camioneta hace tres meses
Domingo Acosta tenía 58 años y fue asesinado a tiros frente a su esposa y su hijo tras ser emboscados durante la compra de un auto.
El hombre asesinado de un disparo frente a su esposa y su hijo en la localidad bonaerense de Castelar había sido víctima de otro asalto a mano armada hace unos meses, cuando llegaba a su domicilio de Gregorio de Laferrere.
Domingo Acosta tenía 58 años y junto a su esposa Braulia González y su hijo Cristian se dirigieron la esquina de Padre Arrieta y Ventura Bustos, tras pactar la compra de un auto por Facebook.
Sin embargo, al llegar al lugar, fueron emboscados por dos delincuentes armados.
"Parece que quería comprarle un auto al hijo. Son una familia laburante y buenas personas", contó Fernando, vecino de la víctima.
El hombre contó que a Acosta "hacía tres meses le habían robado su camioneta en la puerta de la casa" y sobre ese hecho de inseguridad detalló que "venía con su camioneta y aparentemente le cruzaron un auto. Fue a los tiros, la había sacado barata".
Emboscada y crimen en Castelar
El homicidio ocurrió ayer poco antes de las 14, en la intersección de las calles Padre Arrieta y Ventura Bustos, donde Acosta y su familia habían acudido tras pactar la compra de un auto por $5.000.000 a través de Marketplace, de Facebook.
La familia, que llegó al lugar a bordo de un Ford Focus blanco desde Gregorio de Laferrere, partido de La Matanza, fue emboscada por los asaltantes que iban a pie.
En ese momento, Acosta se resistió al robo, por lo que los delincuentes iniciaron una balacera e hirieron a padre e hijo.
Acosta sufrió una herida en el rostro y murió, mientras que su hijo resultó baleado en la pierna izquierda y su mujer quedó ilesa.
Tras el ataque, los delincuentes huyeron en el auto de las víctimas con la suma de dinero que éstas habían llevado para la transacción.
Los homicidas siguen prófugos
Efectivos de la comisaría 7ma. de Morón fueron alertados sobre el asalto y comenzaron a relevar la zona en busca de cámaras de seguridad que hayan captado la fuga de los agresores, que por el momento permanecen prófugos.
Los investigadores creen que los delincuentes pudieron haber pactado la supuesta venta a pocas cuadras del Acceso Oeste para escapar rápidamente hacia la zona de Villa Tesei, partido de Hurlingham.
Los delincuentes son intensamente buscados por la policía, mientras que se esperan los resultados de la operación de autopsia realizada en la morgue de Morón.
El hecho es investigado por personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial Morón, a cargo de Valeria Courtade.
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