El conflicto entre Néstor Ortigoza y su expareja: denuncias cruzadas de violencia y allanamiento
En medio de la difícil situación que atraviesa San Lorenzo, el mánager deportivo ahora se encuentra en una disputa con la madre de sus hijos.
El exfutbolista y exmánager de San Lorenzo, Néstor Ortigoza, se encuentra en el centro de una compleja situación legal tras presentar una denuncia contra su expareja, Lucía Cassiau, por violencia familiar. Este conflicto derivó en una serie de acciones legales que incluyeron un allanamiento en el domicilio de ella, en un barrio cerrado de Canning, Buenos Aires, donde se encontraron armas de fuego y municiones.
El episodio comenzó cuando quien fue una figura destacada en el Ciclón denunció a Cassiau ante la Justicia, alegando que sus hijos, de 12 y 10 años, habían sido víctimas de violencia familiar por parte de su madre. En respuesta a esta denuncia, la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) n.º 3 Descentralizada de Ezeiza, bajo la dirección del Comisario Mayor Alfredo Marcelo González, llevó a cabo un procedimiento en la residencia.
Durante el proceso que se llevó a cabo, las autoridades hallaron dos pistolas: una Glock 17 calibre 9 mm y una Bersa BP9CC del mismo calibre, junto con 84 municiones.
Las armas estaban registradas a nombre de Cassiau, quien presentó la documentación correspondiente. La situación tomó un giro aún más complicado cuando, tras el allanamiento, la mujer procedió a denunciar a Ortigoza por violencia de género.
Esta denuncia no es el primer encuentro del exvolante central con la Justicia en este tipo de casos: hace dos años, el exmediocampista de San Lorenzo fue condenado a dos años y dos meses de prisión en suspenso por amenazas coactivas contra Mauricio Argañarás, un exempleado del club. Sin embargo, la causa no prosperó más allá de esa condena inicial, ya que la jueza Graciela Angriman determinó la extinción de la acción penal.
Las investigaciones y procedimientos judiciales continuarán para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes, mientras que la opinión pública sigue de cerca este delicado caso que involucra a una figura pública y sus allegados.
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