Jujuy imperdible: el pequeño pueblo en el que las nubes son las protagonistas

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Hay un lugar en Jujuy donde las nubes parecen tocar el suelo y los caminos te conectan con paisajes únicos, historia y aventura. Un destino poco conocido, pero inolvidable.

Si sos de los que buscan lugares distintos, de esos que no aparecen en todas las guías, es una joyita jujeña que tenés que conocer. Se trata de un pueblo rural a 3.470 metros sobre el nivel del mar.

Este rincón escondido de la provincia está rodeado por paisajes que cruzan la Quebrada y las Yungas, lo que le da una riqueza natural inigualable. Pero lo que más sorprende a los viajeros es el paso por el Abra del Zenta, un mirador ubicado a 4.376 msnm, donde literalmente se camina entre las nubes.

Lejos del turismo masivo, es un destino para los que quieren vivir la montaña desde cerca, hacer trekking, descubrir senderos a caballo, conocer la cultura local y disfrutar de una de las vistas más increíbles del norte argentino.

Qué se puede hacer en Santa Ana

La naturaleza manda. En Santa Ana todo gira alrededor del contacto con el paisaje: hay senderos para caminar o cabalgar, vistas panorámicas que cortan la respiración y un ritmo de vida que invita a desconectarse. El Abra del Zenta es sin duda el gran protagonista: desde allí, el mar de nubes lo cubre todo y convierte cualquier caminata en una experiencia mágica.

También se puede explorar la gastronomía local en ferias de artesanías y productos regionales, donde además de platos típicos, vas a encontrar hierbas medicinales que las comunidades usan hace generaciones.

Y si te interesa la historia, este pueblo forma parte del Qhapaq Ñan, el antiguo Camino del Inca, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Una red milenaria de caminos que unía todo el Imperio Inca y que sigue siendo testimonio vivo del pasado andino.

Dónde queda Santa Ana

Santa Ana está ubicada en el Departamento de Valle Grande, al norte de la provincia de Jujuy. Se encuentra a 120 km de Humahuaca y a 230 km de San Salvador de Jujuy, en una zona de difícil acceso pero absolutamente privilegiada en cuanto a su entorno natural.

Su altura y su ubicación en plena transición entre dos ecosistemas lo convierten en un lugar único para los amantes de la montaña, el ecoturismo y la cultura ancestral.

Cómo llegar a Santa Ana

Llegar no es sencillo, pero sí posible. Desde San Salvador de Jujuy, se toma la Ruta Nacional 66, luego se conecta con la Ruta Nacional 34 y, más adelante, con la Ruta Provincial 83. El camino se extiende por unos 230 kilómetros y, en auto, el viaje puede llevar más de seis horas y media, atravesando paisajes intensos y caminos de cornisa.

El acceso es parte de la aventura, y para quienes se animan a recorrerlo, hay alojamientos rurales gestionados por vecinos del lugar, lo que garantiza una experiencia cálida, auténtica y comunitaria.

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