Amenaza de bomba en Casa Rosada: una constante de los últimos años

Política

Desde 2017 se registró un promedio de una amenaza de bomba por año a la Casa Rosada. Usualmente los autores son fácilmente identificados y detenidos.

Personal del área de Explosivos de la Policía Federal recorrió exhaustivamente este jueves la Casa Rosada en busca de un supuesto artefacto explosivo luego de que la sede del Ejecutivo fuera una vez blanco de una amenaza de bomba.

La inspección realizada en todo el edificio "no arrojó ninguna novedad" y la actividad en la sede del gobierno de Alberto Fernández no se interrumpió en ningún momento.

Lejos está de ser esta la primera vez que la Casa Rosada es objeto de esta clases de amenazas. De hecho en los últimos años se pueden rastrear llamadas telefónicas de esta naturaleza a razón de al menos una por año en promedio.

En octubre de 2016 un hombre llamó al 911 y aseguró haber colocado un artefacto explosivo en la Casa Rosada. La amenaza se produjo en momento en los que el entonces presidente Mauricio Macri se encontraba en Roma para reunirse con el papa Francisco y asistir a la ceremonia de canonización del cura Brochero.

El llamado se registró además apenas unas horas más tarde de que se registraran amenazas similares contra la entonces gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal y el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. Todos referentes de Cambiemos.

En enero de 2017 un hombre fue detenido luego de llamar al 911 y lanzar amenazas similares a la Casa Rosada y los estadios de River Plate y Boca Juniors.

En aquella oportunidad el hombre aseguró haber colocado diez bombas en esos lugares.

Ese mismo año, pero en octubre, un llamado telefónico alertó a los empleados del histórico edificio de Balcarce 50 sobre la presencia de un presunto aparato explosivo dentro de las instalaciones. Un parte oficial aseguró más tarde que se trató de "una falsa alarma", por lo que la actividad habitual no sufrió interrupción alguna.

Ya en mayo de 2019 las amenazas de bomba estuvieron dirigidas contra la Casa Rosada y el anexo de la Cámara de Diputados de la Nación. El edificio del anexo debió ser evacuado aunque no se tomó la misma medida en el Palacio donde se estaba realizando en esos momentos el velatorio del diputado de la UCR Héctor Olivares.

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