Carolina Piparo se quebró y abandonó la reconstrucción de la salidera
La víctima del brutal asalto, por el cual perdió a su bebé Isidro en 2010, presenció la escenificación del ataque hasta que los investigadores reprodujeron el momento en el que la balearon.
Con la mano en su boca y muy angustiada, Piparo observó la escena en la que dos hombres en moto asaltaban a una mujer que tomó su rol en el trágico asalto ocurrido el 29 de julio de 2010 en la puerta de su casa de 21 y 36.
En la reconstrucción, realizada en el marco del juicio oral público que lleva a cabo por el hecho que tiene en el banquillo de los acusados a siete hombres, se pudo ver como uno de los sujetos la obligó a bajar del auto, le sacó el bolso con el dinero y la baleó cuando se encontraba en el piso.
La reconstrucción comenzó a las 11, en el horario en que Piparo llegó en auto a su casa de calles 21 y 36 de La Plata y fue interceptada por un delincuente que le exigió la entrega del dinero que acababa de retirar de una entidad bancaria.
El hecho ocurrió el 29 de julio de 2010, cuando la mujer, embarazada de Isidro, retiró 10 mil dólares y 13 mil pesos de la sucursal del Banco Santander Río ubicada en calles 7 y 42 de La Plata y regresó a su domicilio.
Piparo conducía y su madre, María Ema Cometta, viajaba a su lado, y al llegar a su casa no alcanzó a abrir la puerta del auto para descender que un joven le abrió la misma y le gritó: "¡Dame la guita que sacaste del banco!".
Al declarar el lunes pasado en el inicio del juicio, la víctima recordó: "Yo grite 'no' y hasta hoy me pregunto por qué grité 'no', porque no era un 'no' de no darle el dinero, y no sé si tomaron ese `no` como una negativa".
Piparo relató que sintió un golpe en la cabeza, sangre en uno de sus ojos, que fue "arrancada del auto" y al caer a la vereda le rogó al agresor: "No me hagas nada, te doy todo, estoy embarazada".
En ese momento, la mujer estaba arrodillada, el delincuente le efectuó un disparo y luego escapó junto a un cómplice en una moto roja.
La agresión fue presenciada por Cometta y por una pareja que circulaba en una camioneta que intentó ayudar a la mujer cuando era golpeada dentro del automóvil. Se trata de Tomás Trebec y María de los Ángeles Muñoz, quienes estacionaron su camioneta detrás del vehículo de Piparo, pero al ver que el hombre que agredía a la mujer estaba armado emprendieron la marcha y recién al llegar a la calle 35 se detuvieron y regresaron a ayudar a la embarazada.
Trebec fue el primero en ayudar a Piparo, quien apenas podía respirar a raíz del balazo que le perforó el pulmón.
La mujer fue trasladada de urgencia al hospital San Roque de Gonnet, donde se le practicó una cesárea de emergencia. Su bebé fue reanimado y sobrevivió una semana hasta que murió a raíz de los daños sufridos al no recibir oxígeno por el disparo que recibió su madre.
La agresión también fue vista por Nora Pacheco, una vecina de la calles 21 entre 35 y 36, quien presenció el momento en que le disparaban a Piparo y luego huían. Por ello, en la reconstrucción estarán presentes, además de Piparo, su madre, los testigos Trebec y Pacheco y los abogados defensores de los siete imputados.
Sin embargo, la testigo Muñoz no pudo ser localizada para que forme parte de la diligencia ya que estaría viviendo en la provincia de Misiones. Hasta el momento, tanto Cometta como Trebec reconocieron al imputado Carlos Burgos como el joven que le disparó a la embarazada.
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