Vicentin: cronología de un gigante de 90 años que debió ser rescatado por deudas impagables

Sociedad

El Gobierno anunció que el Estado intervendrá el holding alimentario Vicentin por sus deudas contraídas con el Banco Nación.

En junio de 2016 el holding Vicentin Family Group le compró a SanCor su línea de yogures, flanes y postres a US$100 millones, lo que extendió aún más su presencia en el mercado lácteo local. Cuatro años más tarde, la compañía está en una crisis económica tal que el Gobierno anunció que será intervenida por el Estado debido a que le debe US$350 millones al Banco Nación.

Vicentin fue fundada en 1929 en Avellaneda, Santa Fe, y todavía es una "empresa familiar" aunque tiene plantas ligadas a cereales y oleaginosas en esa localidad, en San Lorenzo y Ricardone. Además abarca desde los Yogs de SanCor y los productos de Molinos Rio de la Plata hasta el algodón Estrella, los vinos de bodega Sottano, carne de feedlot y una compañía de biodíesel a base de maíz y sorgo.

El "grupo agroindustrial", como se define en su sitio web, recibió en mayo de 2019 un financiamiento por US$ 150 millones del banco de desarrollo holandés FMO y el Crédit Agricole Corporate and Investment Bank (CACIB).

La inyección de capitales fue descrita por el FMO como un préstamo a cinco años por US$45 millones otorgado por la entidad holandesa, y otro a tres por US$105 millones de parte de bancos comerciales, instituciones financieras y fondos de inversión.

En paralelo los ejecutivos de Vicentin pidieron préstamos en otras entidades financieras, incluido el Banco Nación, al que le debe gran parte de los US$1.350 millones que adeuda en total.

Para diciembre de 2019 los ejecutivos de Vicentín iniciaron "un proceso de reestructuración de pagos a partir de una situación de estrés financiero" que tenía la compañía, que también está en el centro de una causa abierta que está en manos del juez Julián Ercolini, y en la cual fueron imputados por el fiscal Gerardo Pollicita el último presidente del Banco Nación durante el gobierno de Mauricio Macri, Javier González Fraga, y los ejecutivos del conglomerado santafesino, Alberto Padoán y Gustavo Nardelli.

Desde la compañía afirmaron en diciembre de 2019 que a pesar de haber realizado inversiones por US$900 millones en los últimos 10 años en sus plantas de molienda, biodiésel, etanol y en sus puertos que conllevó a "un significativo aumento" en el tonelaje molido y exportado, "se ha visto negativamente afectadas por un contexto de crisis recurrentes, aumento de tasas de financiamiento, cierre de mercados y el incremento permanente del costo argentino".

El vicepresidente del Banco Nación, Matias Tombolini, afirmó en enero de 2020 que la empresa "desde septiembre no paga un dólar" aunque "tuvo récord de ventas" en 2019.

Por su parte el director del Banco Nación, Claudio Lozano, concluyó que la deuda de Vicentin es el resultado de "una maniobra fraudulenta de la firma en complicidad con la anterior conducción política del país y de la institución financiera".

Desde la compañía sostuvieron que "la deuda no fugó del país, sino que está invertida en bienes productivos".

Vicentin presentó el 24 de enero pasado una oferta de Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE) a sus acreedores que contempla la cancelación de la deuda en un solo pago para 1.200 pequeños productores y en hasta ocho años para corredores y acopiadores, informaron fuentes de la compañía.

Para febrero el directorio de la compañía había pedido "el concurso preventivo ante el Juzgado de Primera Instancia Distrito Número 4 en lo Civil y Comercial, Segunda Nominación de Reconquista", en la provincia de Santa Fe.

En total, la deuda de Vicentín es de US$1.350 millones, de los cuales unos US$1.000 millones son con los bancos y, otros US$350 millones, con empresas del sector agrícola.

El Banco Nación es el principal acreedor de la empresa, con $18.000 millones, seguido por el Provincia con $1.600 millones, y el Banco de Industria y Comercio Exterior (BICE), con $5 millones.

Vicentin tiene hasta la fecha más de 2.600 acreedores que no recibieron por parte de la empresa pago alguno por sus prestaciones.