Una parrilla de barrio que suma espíritu de cantina y platos de bodegón

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En una tranquila esquina de Villa Urquiza, Arde propone una experiencia que combina parrilla y cocina porteña, en un espacio pensado para el encuentro.

En el mapa gastronómico de Villa Urquiza, Arde se afirma como un punto donde la parrilla convive con recetas de bodegón y una impronta de cantina moderna. La propuesta se despliega en un local amplio y luminoso, con grandes ventanales, hierro y madera como protagonistas y una cava en altura que acompaña el recorrido visual del salón. La vereda, cómodamente equipada, ofrece la oportunidad de disfrutar también al aire libre. Abre todos los días desde el mediodía hasta la medianoche, lo que permite tanto almuerzos como cenas sin apuro.

La carta ofrece sabores de la cocina argentina. Es el caso de entradas como empanadas fritas de carne cortada a cuchillo, buñuelos de acelga con alioli y tortillas servidas en su punto, como la de papa española con chorizo colorado. El revuelto gramajo, con panceta ahumada, pimientos asados, arvejas, huevos y papas pay, son ideales para llevar al centro de la mesa y compartir.

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Las milanesas ocupan un lugar central, con versiones de carne o pollo y variantes clásicas como napolitana, suiza o Maryland. El matambrito, tanto de cerdo como de ternera, puede pedirse a la pizza o con mostaza y miel, mientras que platos como las albóndigas con puré y salsa portuguesa, las mollejas crocantes con papas noisette y el risotto de calabaza asada amplían el recorrido más allá de la parrilla. La sección de pastas artesanales suma opciones como tagliatelles de espinaca con ragú bolognese, fusillis al fierrito con tuco y pesto y ravioles de calabaza y mozzarella con salsa de hongos.

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El fuego es, de todos modos, el eje del lugar. La parrilla ofrece cortes clásicos como bife de chorizo, ojo de bife con manteca de hierbas, asado bandera, entraña y pollo a las brasas, además de achuras como chorizo, morcilla, chinchulines y mollejas. Para compartir, se recomiendan la tabla de achuras y la tabla de carnes, pensadas para recorrer distintos puntos del asador en una sola elección.

Las guarniciones acompañan con variedad: papas fritas, puré, batatas con miel, ensaladas verdes y combinaciones más elaboradas, como la de calabaza asada con espinacas, hongos y vinagreta de miel. El cierre mantiene la línea clásica con postres como flan casero, budín de pan y volcán de chocolate. Cabe resaltar que toda la carta está disponible también para delivery y take away.

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La interesante selección de vinos y espumantes de bodegas reconocidas ofrece el maridaje ideal para los platos de esencia porteña de la carta. Con una cocina de sabores caseros, materias primas cuidadas y un ambiente pensado para compartir, Arde es una parrilla con alma de cantina, donde encuentro y disfrute son la premisa.

Dirección: Pedro Ignacio Rivera 4999, Villa Urquiza.

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