Ricardo Nissen le respondió a Esteban Bullrich y explicó la situación de la fundación del exministro de Educación

Política

El titular de la Inspección General de Justicia respondió a las críticas del exsenador Esteban Bullrich.

Esteban Bullrich utilizó las redes sociales para mostrar su malestar porque todavía no pudo terminar de conformar en el país su Fundación pero el exfuncionario de Cambiemos no contó que faltaron papeles y firmas, como la de un contador, como para poder conformarla.

Por eso, el titular de la IGJ, Ricardo Nissen, en una entrevista explicó por qué no no se pudo conformar todavía la Fundación Esteban Bullrich.

"En principio le quiero comentar -comenzó afirmando Nissen- que la escritura pública de constitución de la Fundación Esteban Bullrich se realizó el día 16 de febrero de este año y el trámite fue recién ingresado a la IGJ el 14 de marzo. El objeto de la 'Fundación Esteban Bullrich' está vinculado a la promoción, estudio, investigación, desarrollo, financiamiento e incentivo de tratamientos contra la Esclerosis Lateral Amniótica (ELA) y de toda otra enfermedad neurogenerativa o relacionada con el sistema nervioso. Quiero agregar que es un objeto sumamente valioso por lo que la IGJ tiene especial interés no solo en que la entidad logre su autorización para funcionar sino que cumpla con su objeto, ya que representa un beneficio para toda la comunidad".

Y agregó: "En ese sentido, nuestra gestión está fuertemente enfocada a incentivar la constitución de entidades de bien público, especialmente aquellas vinculadas a personas en situaciones desfavorables ya sea por cuestiones de salud, género, vulnerabilidad socio económica, entre otras. Para ello, se han establecido procedimientos simplificados y gratuitos para constituir nuevas entidades y para regularizar las que ya están en funcionamiento"

Esteban Bullrich expresó que existe una traba burocrática que impide terminar con el trámite de su fundación: "No es cierto", sentenció Nissen.

"No son trabas burocráticas ni hay demora de la IGJ. El trámite de inscripción de la fundación de Bullrich fue ingresado en IGJ el 14 de marzo de 2022, casi un mes después de que hicieron la escritura pública de constitución. Luego de realizar el control formal del expediente, como lo manda la ley, dicho trámite pasó al Departamento Contable donde se realizaron algunas observaciones técnicas y contables al presupuesto y proyecto de trabajo que la fundación se propone realizar durante sus primeros tres años. Dichos requerimientos fueron notificados a la entidad el 13/04", puntualizó Nissen.

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Y más adelante, el titular de la IGJ explicó: "En primer término se observó que faltaba la firma del contador público, requisito indispensable para la aprobación del trámite, ya que este profesional dictamina sobre la razonabilidad del presupuesto, lo cual es de suma importancia para el otorgamiento de la personalidad jurídica de dicha entidad. Además se solicitó información adicional respecto de los ingresos de la fundación, que ellos estimaron en más de doscientos millones de pesos, exactamente, $221.184.000. También respecto de los gastos proyectados, los cuales ascienden, a una suma similar".

Según se explicó desde la Inspección General de Justicia la fundación contestó a su requerimiento recién el 27 de mayo, es decir que se tomó más de 40 días para hacerlo y "si bien cumplió con lo requerido en cuanto a la falta de firma del contador, contestó en forma incompleta e inespecífica la información solicitada sobre los ingresos y egresos proyectados, que reitero, dado a las importantísimas sumas involucradas, merecían una explicación más detallada".

Luego, Nissen destacó: "Así se lo hicimos saber el día 3 de junio, a los 5 días hábiles de haber recibido esa completa información, reiterando las observaciones ya efectuadas, requiriendo una respuesta concreta y detallada. Es oportuno señalar que ha pasado ya una semana de esta nueva vista y la entidad no ha dado ninguna respuesta".

En estas horas se supo que la Inspección General de Justicia tramitó el expediente dentro de los plazos y parámetros habituales. De hecho, se remarcó que puede decirse que si existe alguna traba para que la fundación tenga su autorización para funcionar, es la demora del interesado para iniciar el trámite y para contestar las observaciones en forma oportuna y adecuada

"¿Estas observaciones que le cursaron son habituales o están vinculadas a que el fundador es Esteban Bullrich?", se le consultó a Nissen, quién respondió: "Lo único cierto es que el Código Civil y Comercial, a través de los artículos 194 y 199, impone a las fundaciones, como requisito de constitución, que tengan un patrimonio inicial que posibilite razonablemente el cumplimiento de los fines propuestos; y que, además presenten los planes que la entidad proyecta ejecutar durante los primeros tres años, con 'indicación precisa de la naturaleza, características y desarrollo de las actividades necesarias para su cumplimiento, como también las bases presupuestarias para su realización'”.

"Teniendo en cuenta eso -continuó Nissen-, si la fundación nos dice que va a gastar doscientos millones de pesos y que su patrimonio es de quinientos mil pesos, es sumamente razonable que la Inspección General de Justicia, como organismo de control de todas las personas jurídicas que operan en la CABA indaguemos cómo se va a financiar la fundación para poder cumplir con su objeto, que reitero, es muy valioso y de interés público".

"Quiero ser muy claro al respecto, pues las observaciones efectuadas como requisito previo para otorgarles a cualquier Fundación su personalidad jurídica, nada tiene que ver con Esteban Bullrich, sino que es el procedimiento legal que se lleva a cabo con todas y cada una de las fundaciones que solicitan autorización para funcionar. Desde nuestra parte no hay una mirada sesgada de los trámites según quien los presente, sin interesar si ellos se vinculan con el oficialismo o con la oposición. Solamente buscamos que se ajusten a la normativa vigente", aseveró el titular de la IGJ.

"Insisto que, con relación a este expediente, si existe alguna demora es por parte de los interesados y no de la IGJ. Los números actuales, en relación a los procesos auditados, nos muestran que los plazos de tramitación de la IGJ han mejorado sustancialmente respecto de lo ocurrido durante la presidencia de Mauricio Macri, mas interesado en desmantelar a este Organismo que en el legal funcionamiento de la Inspección General de Justicia, que tiene a su cargo el control de las personas jurídicas inscriptas en esta Jurisdicción, que es una función en la que está comprometido el interés general y en el caso de fundaciones, el bien común", concluyó Nissen.

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