"Ya demostramos que existimos, es hora de visibilizar cómo vivimos y enfrentamos al mundo"
Hasta el próximo 31 de julio se realiza de forma anónima y online el Primer Relevamiento Nacional de Condiciones de Vida de la Diversidad Sexual y Genérica, clave para poder seguir ampliando derechos.
La teoría de la Ventana de Overton señala que para cada tiempo y lugar existe una estrecha ventana a través de la cual es posible vislumbrar el amplio espectro de ideas. Esta ventana no se queda quieta. Se mueve de izquierda a derecha y de derecha a izquierda de acuerdo con los tiempos ocultando algunas ideas por momentos y descubriendo otras al mismo tiempo que antes no eran "pensables". Esta ventana muestra en definitiva el ideario aceptable por el público en ese momento determinado.
En Argentina, la renovada fuerza que vienen adquiriendo desde hace un tiempo los discursos de derecha lograron ir corriendo esta ventana cada vez más hacia ese sector del espectro de ideas al tiempo que se fueron invisibilizando otras. Así, no extraña escuchar por estos días cada vez más precandidatos que, lanzados de lleno en la campaña, centran sus propuestas electorales en la supresión de derechos más que en la posibilidad de ampliarlos.
Frente a este escenario las estrategias de visibilización de las distintas desigualdades, discriminaciones e inequidades que nos atraviesan funcionan como actos de resistencia y germen para futuros nuevos derechos, incluso en tiempos en que la Ventana de Overton los mantiene a la sombra.
El Primer Relevamiento Nacional de Condiciones de Vida de la Diversidad Sexual y Genérica que lanzaron a fines de junio (y que puede responderse de manera online hasta el próximo 31 de julio) más de 50 investigadores de cuatro diferentes universidades nacionales, junto al Conicet y el Centro Nacional de Población apuesta a echar un poco más de luz sobre este colectivo de modo de seguir avanzando en su plena inclusión.
"Contestar esta encuesta es una forma más de visibilizarnos, estamos acostumbrados a estrategias de visibilización como la de la Marcha del Orgullo, o a la aparición de gays y lesbianas en distintas ficciones, pero hay otra forma de visibilización que también es esta, que es desde el anonimato de una encuesta. Porque implica visibilizar cómo vivimos. Con otras iniciativas ya demostramos que existimos, ahora necesitamos mostrar cómo vivimos, cuáles son esas especificidades de las condiciones de vida del colectivo LGBTIQ+, cuáles son las condiciones de vida con las cuales nos enfrentamos al mundo", explicó a MinutoUno Maximiliano Marentes, doctor en Sociología, investigador de CONICET con sede en IDAES/UNSAM y uno de los coordinadores del proyecto.
De acuerdo con Marentes "era necesario avanzar con un estudio de estas características porque no existía mucha información sobre las condiciones materiales de existencia de la población de la diversidad sexual y genérica, sí sobre otras cuestiones como el acceso a la salud, trabajos sobre patrones afectivos, experiencias de sexualidad o socialización, pero había muy poco sobre las cuestiones laborales, sobre cómo se gana la vida la población LGBTIQ+".
Y abundó: "era necesario hacer este estudio que permitiera reconstruir cuáles son esas condiciones de vida ligadas especialmente a la esfera ocupacional, pero también a las condiciones habitacionales y educativas por ejemplo, que en algún punto están todas relacionadas con la dimensión más económica o material".
El estudio parte de una premisa fundamental y es que "formar parte de la comunidad LGBTIQ+ influye de algún modo, intercede, en las diferentes esferas de la vida, es decir, no es algo ligado exclusivamente a la sexualidad o a un proceso interno, sino que también condiciona los modos en que nos relacionamos con el mundo y de allí que se traduzca en discriminación o menores ingresos, por ejemplo y por eso creemos que formar parte de este colectivo se traduce en mayores condicionamientos a la hora de vivir una vida digna y libre de violencias".
Marentes destacó además la muy buena recepción que está teniendo el relevamiento. "La verdad es que teníamos expectativas muy conservadoras y la respuesta fue realmente muy buena, más de 10 mil personas ya participaron", explicó y consultado acerca de las razones de este aluvión de participación destacó que "aunque este relevamiento lo lanzamos un grupo de investigadores que formamos parte del mundo académico, lo cierto es que muchos se pusieron al hombro el desafío de que fueran muchos más quienes participaran y eso hizo que esta iniciativa no sea solo académica sino también una iniciativa política. Contestar esta encuesta es también una forma de visibilizarnos".
Aunque se trata de la primera vez que en la Argentina se lanza un relevamiento de estas características a nivel nacional, existen antecedentes de experiencias similares en el Reino Unido, México, Ecuador y Uruguay, países donde la información obtenida se convierte en el insumo clave para la posibilidad de discutir nuevas políticas públicas de inclusión.
El Primer Relevamiento Nacional de Condiciones de Vida de la Diversidad Sexual y Genérica estará abierto hasta el próximo 31 de julio y se puede p articipar de él, de forma anónima y virtual, ingresando en este link.
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