Los hechos trágicos que la NASA tuvo que tener en cuenta para salvar a los astronautas varados en el espacio

Sociedad

Las explosiones de los transbordadores espaciales Challenger y Columbia retumbaron en la cabeza de los directivos de la Agencia Espacial de EEUU a la hora de hacer regresar a los dos tripulantes de la cápsula Starliner.

Los directivos de la Agencia Aeroespacial Norteamericana (NASA) tuvieron que decidir qué hacer con sus astronautas varados en el espacio, luego de que la flamante cápsula Starliner de Boeing presentara distintos fallos al arribar a la Estación Espacial Internacional (EEI) y no pudiera garantizar un viaje de regreso tripulado y seguro a la Tierra.

Conscientes de que una vez en su historia espacial y no hace mucho tiempo, cometieron un segundo error fatal que le costó la vida a 7 de sus astronautas, la NASA no quiso repetir las tragedias espaciales Challenger de 1986 y Columbia en 2003.

Los dos trágicos sucesos que la NASA tuvo que tener presente

El 28 de enero de 1986 el transbordador Challenger de la NASA explotó en el aire se deshizo en medio de una terrible explosión a los 73 segundos del lanzamiento de la misión STS-51-L, debido a un fallo en la junta de los anillos sellados del tanque de combustible externo. Y que el otro error repetido de la NASA fue el accidente del transbordador espacial Columbia que explotó el sábado 1 de febrero de 2003 sobre Texas, cuando la nave hacía su reingreso atmosférico, matando a otros 7 astronautas.

Los expertos precisaron que durante el lanzamiento de la misión STS-107 una pieza de aislamiento de espuma se desprendió del tanque externo del transbordador espacial y golpeó el ala izquierda. La desintegración del Columbia ocurrió cuando el transbordador reingresó en la atmósfera, el daño en una de sus alas permitió que los gases atmosféricos calientes penetraran y destruyeran la estructura interna, lo que provocó que la nave espacial se volviera inestable y poco a poco se rompiera en pedazos.

El regreso de la cápsula Starliner

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El aterrizaje de Starliner fue calificado como exitoso, aunque no estuvo exento de problemas. (Foto: NASA/Aubrey Gemignani

El aterrizaje de Starliner fue calificado como exitoso, aunque no estuvo exento de problemas. (Foto: NASA/Aubrey Gemignani

La cápsula Starliner de Boeing aterrizó sin tripulantes y con ayuda de tres paracaídas en el desierto de White Sand, en Nuevo México (EEUU), después de un viaje de seis horas, tras desacoplarse el viernes sin problemas de la EEI.

Después de tres meses en el espacio, en los que buscó en vano solucionar sus problemas técnicos para tener un buen retorno con sus dos astronautas, la nave aterrizó en solitario y ya es objeto de estudio de los expertos de Boeing.

Steve Stich, directivo del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, expresó esta semana que las fugas de helio en la nave posiblemente están vinculadas a la corrosión de unos sellos. El experto defendió que durante la misión tripulada de prueba, llamada CFT (Crew Flight Test), muchas partes del vuelo transcurrieron muy bien y que no cree que sea necesario un nuevo diseño para el sistema de propulsores, pero sí una importante revisión sobre su funcionamiento.

Igualmente, admitió que la NASA no se arrepentía de haber traído a Starliner sin los astronautas, dadas las preocupaciones sobre la nave espacial. “Creo que tomamos la decisión correcta”, dijo.

El trabajo de la NASA y Boeing será ahora determinar qué salió mal con la nave espacial e intentarán determinar si se necesitará hacer cambios de diseño en el sistema de propulsión de la nave, volarla de una manera diferente que no sobrecargue los propulsores, o incluso realizar otro vuelo de prueba.

Los astronautas varados ahora deberán regresar a la Tierra recién en febrero, cuando culmine la misión espacial Crew-9 de SpaceX, que volará en las próximas semanas con dos astronautas y dos asientos libres.

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