Maradona, papá por cuarta vez

En la publicación se puede ver a la pareja de Diego, Verónica Ojeda, tomando sol en bikini, y ya no puede ocultar la panza de cuatro meses. Ni Verónica -también oriunda de Villa Fiorito- ni Maradona hablaron, pero la foto es prueba contundente para que ya no queden dudas.

Según la revista, Ojeda, asistió a una clínica ubicada sobre la avenida Meeks de Lomas de Zamora, donde además de confirmarle la noticia le dieron el primer adelanto: podría ser una nena, la primera para ella, pero la tercera para el director técnico de la selección, que es padre de Dalma, de 22 años, y Gianina, de 20.

Basta con hacer cuentas para calcular que el primer hijo de la preja podría haber sido concebido en septiembre del año pasado, cuando la pareja se instaló en el spa italiano  de lujo "Palace Merano", de la clínica Henri Chenot, donde Maradona se internó para aliviar el estrés en el medio de su primer campaña como DT, que iba a los tumbos.

Al parecer, Maradona no le habría contado la noticia a sus hijas ni a su ex mujer, Claudia Villafañe, para evitar el momento tenso, sobre todo porque su relación con Ojeda pendía de un hilo. Pero después de un reparador viaje a Miami con amigas, la novia del DT volvió más tranquila y la relación se recompuso.

Claro, que el regalo que el ex futbolista le hizo a la futura madre de su hijo puede haber ayudado: una camioneta Honda CVR, color negra, para su cumpleaños número 32. El nacimiento del primer hijo de la pareja está previsto para junio, mes en el que Maradona estará un poco ocupado... en el Mundial de Sudáfrica.

El verdadero problema de Maradona ahora será calmar las aguas entre sus hijas: mientras Dalma declaró en el pasado que no tiene relación con Ojeda por "una elección personal", Gianina le habría anticipado al DT que no podrá ver a su nieto, Benjamín Agüero.

Este será el cuarto hijo de Maradona: además de Dalma y Gianina, a quienes tuvo con su ex mujer Claudia Villafañe, también está Diego Junior, un joven de 22 años al que el entrenador de la Selección no reconoció a pesar de que la Justicia italiana lo dio como su hijo. Además, la Justicia italiana le obligó a aceptar la paternidad de una chica de 13 años llamada Jana.