Turismo en Mendoza: el sorprendente destino con un laberinto imperdible

Lifestyle

Entre viñedos y paisajes de ensueño, Mendoza guarda un rincón que combina arte, historia y naturaleza. Una experiencia distinta que sorprende a todos.

Mendoza es mucho más que vino, bodegas y montaña. En pleno sur de la provincia, hay un lugar que despierta curiosidad por su magia y su vínculo con uno de los escritores más importantes de la literatura argentina. Se trata de una propuesta distinta, ideal para quienes disfrutan de los paseos al aire libre, la historia y los paisajes que invitan a perderse —literalmente— entre sus caminos verdes.

Durante las vacaciones de invierno, este punto se volvió uno de los preferidos por turistas y locales. Su atractivo principal no es solo su belleza natural, sino el homenaje poético que encierra su diseño. Cada rincón está pensado para hacer sentir al visitante dentro de un universo literario, donde el misterio y la contemplación se mezclan con el aroma a cipreses y vino mendocino.

E una joya escondida que se convirtió en una de las experiencias más originales de la provincia. Su estructura, vista desde el aire, tiene forma de libro abierto y representa la fusión entre arte, literatura y naturaleza. Es un paseo que encanta tanto a grandes como a chicos y que ofrece una perspectiva distinta del turismo en Mendoza.

Qué se puede hacer en El Laberinto de Borges

image

El recorrido principal consiste en atravesar el laberinto de más de mil metros cuadrados formado por cipreses, diseñado como homenaje a Jorge Luis Borges. El objetivo es llegar al centro, donde se levanta una estrella de ocho puntas, símbolo recurrente en su obra. El camino no es fácil, pero forma parte del encanto: perderse entre los pasillos verdes es también una forma de conectar con el espíritu del escritor.

Además del laberinto, el predio cuenta con espacios para hacer picnic, sacar fotos y disfrutar del paisaje. También se realizan visitas guiadas donde se revelan los secretos y significados que esconde el diseño. Es un plan perfecto para quienes buscan una salida diferente, que combine arte, historia y naturaleza.

Dentro de la finca hay una pulpería tradicional que ofrece comidas típicas como empanadas, locro, pastelitos y, por supuesto, vinos locales. Para quienes desean una experiencia más completa, se puede alojar dentro del predio, rodeado de viñedos y árboles centenarios, o participar de las pequeñas muestras literarias y artísticas que se organizan durante el año.

Dónde queda El Laberinto de Borges

Este espacio se encuentra en la localidad de San Rafael, al sur de Mendoza, dentro de la Finca Los Álamos, una propiedad que perteneció a la familia de Susana Bombal, amiga íntima de Borges. Rodeada de naturaleza, la finca combina historia, paisaje y cultura, y se consolidó como uno de los sitios más elegidos por quienes buscan una experiencia diferente.

La ubicación, en una zona de clima templado y aire puro, lo convierte en un destino ideal para recorrer en pareja, familia o con amigos. En invierno, el paisaje de los viñedos en reposo y los cerros al fondo crean un escenario de postal.

Cómo llegar a El Laberinto de Borges

Para llegar desde la ciudad de Mendoza, hay que tomar la Ruta Nacional 40 hacia el sur, en dirección a San Rafael. Desde allí, un pequeño desvío por la Ruta Provincial 173 lleva directamente hasta la entrada de la finca.

Quienes viajan en micro pueden llegar hasta la terminal de San Rafael y desde allí tomar un taxi o remis, ya que el predio se encuentra a solo 15 kilómetros del centro. También existen excursiones organizadas que incluyen la visita al laberinto como parte de un recorrido más amplio por la región.

Dejá tu comentario