Los Piojos en River: cambia la piel
Ciro y los suyos ofrecieron durante dos noches más de tres horas de canciones vivas, sorpresas y detalles que marcan la diferencia. Con arreglos inesperados y un oficio sin rigidez, el grupo mostró que tocar bien no es tocar igual. El fuego sigue, aunque ahora arde distinto.